Las filtraciones en techos industriales pueden pasar desapercibidas hasta que causan daños significativos en la infraestructura y los equipos. Detectarlas a tiempo es clave para evitar costos elevados en reparaciones y garantizar la seguridad del espacio de trabajo.
En este artículo, te contaremos sobre métodos eficaces para identificar filtraciones ocultas en techos industriales, desde inspecciones visuales hasta el uso de tecnología avanzada como cámaras termográficas y medidores de humedad.
Además, si buscas soluciones efectivas para prevenir estos problemas, te recomendamos revisar nuestro artículo sobre las ventajas de la impermeabilización con poliuretano líquido e híbrido, una opción innovadora para proteger tu techo industrial. Sigue leyendo para conocer las mejores estrategias de detección y prevención
1.- Identificar señales de filtraciones ocultas
La inspección visual es una de las formas más efectivas y directas para identificar filtraciones ocultas en techos industriales. Para ello es importante prestar atención a las manchas de humedad que suelen aparecer en el techo, las paredes y áreas cercanas como las ventanas o columnas.
Estas manchas pueden presentarse en tonos oscuros, amarillentos o marrones, y son una señal de que el agua ha estado penetrando a través del techo. Si no se abordan rápidamente con una buena impermeabilización en Nuevo León pueden expandirse y generar problemas de moho y hongos, afectando la calidad del aire y la seguridad del lugar.
En caso de que el techo de la zona industrial sea de estructuras metálicas, el óxido y la corrosión serán indicadores de que hay filtraciones. En áreas como tornillos, remaches y juntas, la acumulación de humedad debilita el metal y compromete la estabilidad del techo.
Otro de los signos importantes son las grietas o deformaciones en el techo. Si observas abultamientos o áreas donde la pintura se está desprendiendo, es posible que el agua haya comenzado a acumularse en esa zona.

2.- Termografía infrarroja
Otra manera de detectar es a través de la termografía infrarroja. Esta tecnología utiliza cámaras termográficas para detectar variaciones de temperatura en la superficie del techo, lo que permite observar patrones de calor o frío que no se pueden identificar a simple vista.
Cuando el agua se filtra a través del techo, tiende a enfriar las áreas afectadas, ya que la humedad altera la capacidad de aislamiento del material. Las cámaras termográficas capturan estos cambios de temperatura, mostrando zonas más frías que indican la presencia de humedad debajo de la superficie.
La principal ventaja de la termografía para los servicios de impermeabilización es que no requiere una intervención invasiva, puesto que permite detectar la humedad sin necesidad de realizar perforaciones o dañar el material del techo.
3.- Pruebas de agua para detectar filtraciones
Por su parte, las pruebas de agua son un método práctico y directo para identificar filtraciones ocultas en techos industriales. Consisten en rociar agua de manera controlada sobre la superficie del techo utilizando mangueras de alta presión para simular condiciones de lluvia intensa.
Para obtener resultados precisos, es recomendable realizar la prueba por secciones, empezando por las áreas más altas y avanzando progresivamente hacia las más bajas. Es importante detectar las zonas del techo industrial que están afectadas especialmente si se resguarda maquinaria.
Se recomienda contar con personal dentro del edificio para inspeccionar en tiempo real si aparecen manchas de humedad o goteos en el techo y paredes. Esto debe ejecutarse con precaución para evitar una sobrecarga de agua que pueda agravar daños ya existentes.
4.- Medidores de humedad
De igual manera, el uso de medidores de humedad es una técnica eficiente para detectar filtraciones. Estos dispositivos permiten medir la cantidad de agua presente en materiales como concreto, madera, yeso y otros elementos estructurales.
Existen dos tipos principales de medidores de humedad: los de contacto y los de penetración. Los primeros analizan la humedad en la superficie sin dañar el material, mientras que los segundos utilizan sondas para medir la humedad en capas más profundas.
Este método es especialmente útil en estructuras con aislamiento o materiales que no muestran fácilmente signos de humedad en la superficie. Al comparar las lecturas en diferentes áreas, se puede determinar la extensión del problema y tomar decisiones informadas sobre las reparaciones necesarias.
5.- Detectar filtraciones en tiempo real
Al igual que con las pruebas de agua ya mencionadas, las tormentas y lluvias intensas ofrecen una oportunidad invaluable para identificar filtraciones.
Durante estas condiciones climáticas, el agua encuentra con mayor facilidad sus puntos de entrada, lo que permite detectar problemas estructurales que podrían pasar desapercibidos en un día seco.
Realizar una inspección en medio de una tormenta facilita la observación de goteos, manchas de humedad que aparecen repentinamente y acumulaciones de agua en ciertas áreas del techo.
Además, es posible identificar fallas en los sistemas de drenaje, como canaletas obstruidas o filtraciones en juntas y uniones de la estructura. Desde el interior del edificio se debe revisar techos, paredes y columnas para detectar cualquier signo de agua que pueda indicar un problema mayor.

6.- Identificación de puntos vulnerables
Por último, las juntas y sellos en los techos industriales son áreas críticas donde pueden originarse filtraciones si no están en buen estado. Con el tiempo, la exposición a la intemperie, los cambios de temperatura y la expansión de los materiales pueden deteriorar estos puntos de unión, permitiendo el paso del agua.
Para detectar posibles problemas, es recomendable revisar minuciosamente las conexiones entre paneles, las uniones con estructuras metálicas y los sellados en ductos, tragaluces o sistemas de ventilación.
Si se observan grietas, desprendimiento o signos de desgaste en los sellos de silicona o poliuretano, es probable que el agua esté filtrándose por esos puntos.
Una inspección detallada, complementada con herramientas como medidores de humedad o cámaras termográficas, puede ayudar a confirmar la presencia de filtraciones en estas zonas.
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